¿Dónde invertir en el año 2021?
Empecemos aclarando que mis visiones están basadas en un inversor de largo plazo, que buscar armar un patrimonio que le permita lograr la independencia financiera. Es decir, tener inversiones que le generen el ingresos necesario para financiar su estilo de vida sin la necesidad de trabajar en actividades que no te gustan.
Por lo tanto, no estamos haciendo trading ni nos estamos dedicados full time a las inversiones. Solo estamos armando nuestro patrimonio al mismo tiempo que tenemos una vida a la que le dedicamos la mayor cantidad de nuestro tiempo.
Hecha esta aclaración, déjame comenzar con algo que siempre te digo.
La forma de invertir como un profesional es armando una cartera diversificada compuesta por diferentes activos, que preferentemente tengan comportamientos diferentes, y de esta manera, combinando estos activos logro mayor rendimiento y menor riesgo.
No estamos buscando la inversión del momento, sino que estamos intentando armar una cartera lo mas eficiente posible. Esto significa, repito, tener un muy buen rendimiento con el menor riesgo posible y eso solo se logra combinando diferentes inversiones.
No estamos inventando nada con esta estrategia, esta es la manera que invierten los inversores mas sofisticados del mundo, como por ejemplo, el fondo de la Universidad de Harvard o el Fondo Soberano de Noruega.
Arman carteras diversificadas a largo plazo.
Y hoy, la magia de la globalización y la tecnología nos permiten replicar la estrategia de inversión de estos colosos sin importar cuanto dinero tengamos ni donde vivamos. Solo necesitamos conexión a internet, conocimientos básicos y listo, estamos invirtiendo casi de la misma manera que los inversores mas capaces del mundo.
Entonces, el secreto está en cómo armar la cartera. Dónde y en qué activos invertir.
En ese sentido, lo primero que te voy a repetir por vez número un millón…, es que no inviertas todo tu capital en la Argentina!
Argentina no es un lugar para invertir a largo plazo, es un país para hacer inversiones especulativas de corto plazo. El riesgo es altísimo y podes perder gran parte de tu dinero en cualquier momento.
Si querés correr riesgos, te recomiendo que lo hagas en el mundo de las criptomonedas, pero no en Argentina. Pero antes de entrar en ese tema, analicemos cómo termina la economía Argentina este año 2020 y que puede pasar en 2021.
El diagnóstico
Los argentinos estamos viviendo la peor crisis de nuestra historia. Aún peor que la crisis de del año 2002 si miramos los fríos números de la economía.
La actividad está por el piso, el PBI va a bajar alrededor de un 10% este año. Y esta baja viene luego de 10 años de recesión. La Argentina no crece desde el año 2010 y el PBI per cápita ya está igual que hace 30 años atrás, que en 1990.
El desempleo es récord, llego a estar as alto que en el año 2002 si ajustamos las cifras oficiales, mira el siguiente gráfico:
Hoy las cifras oficiales dicen que el desempleo es del 11%, pero si lo ajustamos por las personas que no están buscando trabajo en este momento porque están desmotivadas por el Covid, esa cifra es superior al 20% y el trimestre anterior llego a un récord del 30%.
El nivel de gasto publico está desbocado y el déficit fiscal está en un récord de alrededor del 11% del PBI. Mira el siguiente gráfico que muestra la evolución de los ingresos, los egresos y el déficit financiero del estado durante la ultimas décadas.
El gorila que ves ahí es lo que está destruyendo nuestro país. Fijáte como empieza a subir el nivel de gasto a partir del año 1997 casi sin interrupciones. Y fíjate el nivel del déficit fiscal que este año se espera que supera el 10% del PBI, un récord absoluto
El déficit se está financiando en un 90% con emisión monetaria.
Las reservas del banco central están en cero, no quedan dólares genuinos. Nos gastamos alrededor de 70.000 millones de dólares desde el inicio de la corrida contra el peso a inicios del año 2018, si contamos los dólares que tenía el Banco Central en su momento más el dinero que entro por el FMI. Hoy ya no quedan dólares reales, el Banco Central esta usando dólares que no son de el para detener la corrida.
La inflación estaría cerrando este año en alrededor de un 35% pero hay muchos precios que están totalmente reprimidos, como por ejemplo los precio de los servicios públicos que van a cumplir dos años congelados.
Los salarios promedio de la Argentina, si los medimos en dólares, están en niveles africanos y es el segundo más bajo de América Latina después de Venezuela y estamos debajo de Haití. El salario más bajo lo encontramos en Venezuela con un dólar al mes, sigue Argentina con 101 dólares y continua Haití con 104. Quedamos muy lejos de Chile, que con un salario mínimo de 400 dólares lidera la región.
Los argentinos estamos más pobres que nunca.
Los impuestos están en niveles récord, pero los políticos siguen inventando nuevos impuestos. El impuesto a los bienes personales hoy lo pagan las personas que tienen propiedades que tienen un valor de a partir de 13.000 dólares. De esa manera esta medida la riqueza en argentina hoy.
Además, según un informe de la consultora Data Driven Argentina una pyme argentina que paga todos sus impuestos -en promedio- da pérdida, ya que la presión impositiva a la producción representa el 106% de la ganancia neta (antes de impuestos) de una pequeña o mediana empresa. Esta cifra sólo es superada por las Islas Comoras en África)
Los bonos argentinos están rindiendo un 16% anual en dólares, un nivel que es increíble para un mundo de tasas cero donde países como Perú o Paraguay se endeudan a tasas de alrededor del 4% anual.
Conclusión, el panorama es desolador. El país está quebrado, destruido en todas las variables que las quieras evaluar.
Ahora, este es el diagnóstico, esto es el presente de la economía Argentina, pero para nosotros como inversores lo más importante es lo que podría pasar en la Argentina el año que viene.
Así que vamos a analizar lo que puede venir.
Lo que se viene
Una buena manera de entender las perspectivas para el año 2021 en Argentina es dividir los posibles escenarios en tres grandes alternativas.
- La primera alternativa vamos a llamar como el escenario “Explosión”.
- La segunda alternativa vamos a llamarla como el escenario “Despegue”.
- La tercera alternativa la vamos a nombrar como el plan “Vegetar”.
Vamos a ver que significan estos tres escenarios y lo mas importante, que probabilidades tendría cada uno de los escenarios posibles para el 2021.
El escenario explosión es una situación que implica que la crisis de confianza que tiene este gobierno se profundiza. Esto podría venir por varios caminos, como por ejemplo, por una crisis política, una pelea mayor entre Cristina y Alberto, o por un shock externo, suba de tasas de interés o por cualquier otra variable que termine de destruir la poca confianza que hoy queda en la argentina.
La situación es tan precaria, que cualquier resfrío nos puede matar.
Una explosión implicaría una suba mucho mayor del dólar, un dólar oficial convergiendo con el dólar libre y un banco central sin reservas para detener al dólar oficial.
Esto desembocaría en graves consecuencias. La primera es los precios de los bienes y servicios subirían por arriba del 100% anual y la hiperinflación estaría a la vuelta de la esquina.
Se desataría una corrida sobre los bancos, con las personas y empresas intentando sacar los pesos de los bancos en forma descontrolada.
Esto seguramente redunde en mayores restricciones, controles y reestructuraciones y finalmente, una quiebra y huida masiva de empresas y con salarios por debajo de los niveles africanos y desempleo y pobreza generalizada, superando los niveles del 50% que alcanzamos en cada crisis.
Esto terminaría con una crisis social en las calles que seria hasta difícil de controlar para el mismísimo peronismo. Estaríamos ante un escenario de descontrol total y nada tendría valor en la Argentina.
Este es el escenario Explosión.
Luego tenemos el escenario Despegue, que esto seria un shock también, pero un shock de confianza positivo. Implicaría que Alberto Fernández descarte el camino kirchnerista y chavista de su coalición y que de un giro similar al que dio Carlos Menem en la década del 90 cuando nombro a Cavallo como Ministro de Economía luego del primer año y medio de gobierno sin poder controlar la economía y que luego de pasar por una hiperinflación y el plan Bonex, desemboco en un giro rotundo hacia el capitalismo.
Menem y Cavallo lanzaron la convertibilidad, la apertura de la economía, la desregulación y un plan integral pro mercado, disparando uno de los períodos de mayor crecimiento de la historia reciente de nuestro país.
En este escenario la economía crecería muy fuerte, volverían las inversiones, aumentando el empleo, los salarios y el optimismo sobre nuestro país. Podríamos crecer tranquilamente por arriba del 15% en 2021 y lograr crecimiento sostenido por muchos años.
Y el ultimo escenario es el escenario “Vegetar”. Según el diccionario la palabra vegetar significa lo siguiente:
Vivir sin ninguna movilidad y con una vida meramente orgánica, parecida a la de las plantas, generalmente a causa de una enfermedad.
En este escenario, la economía Argentina iría a una inflación de entre el 50% y el 60% anual en 2021.
Los precios, a pesar de la alta inflación anual, seguirían en gran medida reprimidos. No habría inversión en servicios públicos, por lo tanto los servicios de electricidad, gas e internet, por ejemplo, serían cada vez peores, los cortes de luz y gas serían una constante y las señales de internet y celular serían cada vez peores, pero eso si, muy baratas.
Tendríamos cada vez menos productos en los supermercados y en los negocios en general, ya que la economía sobreviviría en base a controles y trabas. Casi no se podría importar nada, por lo tanto, el acceso a tecnología sería casi imposible en forma legal.
Y todos los precios de la economía estarían regulados, por lo tanto el desabastecimiento avanzaría sin prisa pero sin pausa.
Luego de la baja de la economía de un 10% en 2020, el PBI crecería solo un 2% o 3% en 2021 si se logra superar la pandemia del COVID. Si no, la economía se hundiría nuevamente alrededor de un 5% anual.
El desempleo seguiría alto, el empleo privado se seguiría destruyendo y las empresas saliendo del país, solo aumentaría el empleo publico.
Las reservas del banco central seguirían en negativo y el déficit fiscal seguiría por arriba del 5% anual del PBI y solo se financiaría con emisión monetaria.
Seguiría el cepo al dólar, cada vez más fuerte, pero no lograría bajar de una brecha del 100% anual.
El gobierno no arreglaría un nuevo plan con el FMI y se apoyaría en estrechar relaciones con países como Venezuela, China Irán o Rusia y Argentina seguiría totalmente afuera del mundo desarrollado y civilizado.
En resumen, la Argentina seguiría vegetando. Estaríamos en un país muerto, donde la lucha sería simplemente por la supervivencia.
Estos serían los tres escenarios, repito, Explosión, Despegue y Vegetar.
Ahora, la clave es proyectar que probabilidades de ocurrencia tiene cada escenario. Es imposible adivinar que puede pasar en esta Argentina tan compleja, pero no es imposible trazar alternativas y actuar en consecuencia.
Bueno, en mi opinión, el escenario mas probable es el escenario “vegetar” con una probabilidad de ocurrencia del 70%.
Lo sigue el escenario explosión con una probabilidad del 25%
Y cierra el escenario despegar con una probabilidad del 5%.
Por supuesto estas probabilidades van cambiando todo el tiempo y puede haber infinitos escenarios intermedios y para esto es clave mirar lo que va ir ocurriendo los próximos meses, y sobre todo ver que puede pasar en las elecciones de noviembre del año que viene.
Pero, mas allá de todo eso, parece claro que lo mejor para nuestros ahorros y para nuestro futuro estar lo mas lejos posible de la Argentina en 2021.
Si vivís en la Argentina, tu prioridad el año que viene tiene que ser generar ingresos en el exterior y luego ahorrar e invertir en el exterior.
Si tenes ahorros y aun no tenes una cuenta bancaria en el exterior, que tu objetivo para el año 2021 sea abrir una cuenta bancaria en el exterior y de esta manera tener independencia de lo que puede pasar con la Argentina.
Si logras esto, vas a poder pasar la crisis razonablemente bien. Y si la Argentina no mejora nunca, vas a tener la libertad de irte del país cuando quieras. Y si mejora, vas a estar muy bien de todas formas. Así que no tiene sentido que no lo hagas.
Creo que quedo claro porque como inversores no tiene sentido estar en la Argentina, por eso, en la segunda parte de esta nota, que voy a publicar en este mismo blog, voy a hablar sobre cómo invertir nuestro dinero en el exterior.
Federico Tessore
Buenos Aires, Argentina
Diciembre de 2020