En esta nota te voy a contar cuales son las cuatro generaciones de criptomonedas y que características, ventajas y desventajas tiene cada una de estas criptomonedas.
Vamos a ver en qué se diferencian las criptomonedas más nuevas de las más antiguas, qué mejoras se introdujeron y hacia dónde se dirige el mundo de las criptomonedas.
Empecemos!
Como la mayoría de ustedes saben, el origen de las criptomonedas lo encontramos en el Bitcoin.
Por ello, el Bitcoin es la primera generación de criptomonedas.
El 1 de noviembre de 2008 un misterioso mensaje fue enviado a la lista de correo sobre criptografía del sitio web metzdowd.com
El remitente del mensaje era de un desconocido llamado Satoshi Nakamoto.
Este mensaje tenía un título: «Bitcoin: A Peer-to-Peer Electronic Cash System».
Traducido del inglés el título sería: “Bitcoin: un sistema de efectivo electrónico de persona a persona”. Este mensaje contenía un artículo en formato académico de 9 páginas de longitud con las instrucciones para crear un sistema de dinero digital llamado Bitcoin.
En este artículo se proponía la creación de una unidad monetaria de pago descentralizada, con una cantidad limitada a 21 millones de unidades y una emisión preestablecida por un protocolo.
Los nuevos Bitcoins emitidos de acuerdo al protocolo se otorgan en pago por el mantenimiento de la Blockchain de Bitcoin, una red digital, segura y descentralizada que funciona con un protocolo de prueba de trabajo.
Este protocolo implica que para generarse cada nuevo bloque, las computadoras que componen en la red resuelvan complicados problemas matemáticos. La primera computadora en resolver el problema y generar el siguiente bloque de la red recibe como premio una cantidad de bitcoins determinada por el protocolo de la red.
Así, siguiendo el sistema propuesto por Nakamoto en su artículo el 3 de enero de 2009 un grupo de programadores de todo el mundo lanzaron el Bitcoin.
Esta fue la primera generación de las criptomonedas y la que es hoy la cripromoneda mas importante, que al momento de escribir esta nota, tenia un valor total de $862.000 millones de dólares, más de dos veces el PBI de un país como la Argentina.
Ahora vamos a La segunda generación: El Ethereum
La segunda generación de criptomonedas tuvo su origen en enero de 2014, cuando un joven de 20 años llamado Vitalik Buterin llegó a Miami para participar en una conferencia sobre criptomonedas.
En aquella conferencia Buterin se reunión con otros desarrolladores de criptomonedas y planteó la necesidad de crear una criptomoneda con un lenguaje de programación que permitiera la creación de nuevas aplicaciones dentro de su estructura Blockchain.
El código del Bitcoin es inalterable, lo que limita su utilidad a unidad de cuenta y de depósito de valor. Con Ethereum sin embargo estos desarrolladores aspiraban a generar un protocolo de código abierto editable en el que cualquier persona pudiera desarrollar sus propias dApps (Aplicaciones Descentralizadas).
Decenas de criptógrafos, matemáticos e informáticos se unieron al proyecto de Buterin y el 7 de agosto de 2015 se realizó la primera transacción de Ethereum.
Al igual que con Bitcoin, la blockchain de Ethereum funciona a través de miles de nodos distribuidos por todo el mundo que la mantienen funcionando y validan cada una de sus operaciones.
Ethereum tiene tres características principales:
En primer lugar Ethereum es una plataforma de código abierto: esto quiere decir que cualquier programador puede acceder a su código y utilizarlo a su antojo para investigar y aprovechar esta investigación para construir sus propias aplicaciones.
En segundo lugar es programable, lo que quiere decir que a diferencia de otras blockchains los desarrolladores pueden usarlo para crear nuevos tipos de aplicaciones en esta red.
Y en tercer lugar la emisión de Ether (el token generado en la red Ethereum) es ilimitada, por lo que no sustituye al Bitcoin como reserva de valor. Sin embargo, esto podría cambiar en el futuro…
El pasado 5 de agosto entró en funcionamiento la actualización de la red Ethereum EIP-1559. Una de las principales características de esta actualización es la retirada de circulación de parte del Ethereum pagado para ejecutar las transacciones en la red.
En los primeros dos días desde que entró esta actualización en funcionamiento se retiraron 30 millones de dólares en Ethereum, y cada día se retiran millones de dólares más de la red. El objetivo de esta actualización es ralentizar la emisión de nuevos Ethers para que la moneda no pierda valor como sucede con el dinero fiduciario.
Mientras que el Bitcoin se la considera como una criptomoneda relativamente conservadora, comparada a veces con el oro gracias a sus atributos como reserva de valor, Ethereum tiene una aplicación más práctica orientada al desarrollo de innovaciones tecnológicas a partir de la tecnología Blockchain.
Al igual que el Bitcoin, la Blockchain de Ethereum funciona con un protocolo de prueba de trabajo. Una de las consecuencias del uso de un protocolo de prueba de trabajo es el elevado uso de poder computacional de la Blockchain, lo que provoca un elevado consumo energético y unos costos de transacción más altos que limitan la funcionalidad de la red Ethereum.
Como podés ver en el gráfico, desde principios del año pasado el costo promedio de la red de Ethereum se multiplicó por más de 5 veces, con picos en los que el costo es hasta 50 veces más alto.
Este es un tema que los creadores del Ethereum planean solucionar con una nueva actualziación que planean lanzar antes de fin de año. En otro video prometo contarte mas de esto. Pero antes, vamos a ver quien es la tercera generación de criptomonedas.
La tercera generación: Cardano
Con el objetivo de resolver estos elevados costos que limitan la funcionalidad de Ethereum, uno de los cofundadores de Ethereum llamado Charles Hoskinson lanzó su propia criptomoneda en 2017: Cardano.
Gracias a su trabajo desarrollando Ethereum entre 2014 y 2016, Hoskinson conocía muy bien las limitaciones que presentaba el algoritmo de Ethereum basado en “prueba de trabajo”.
Para evitar estas limitaciones Hoskinson lanzó Cardano, su propia moneda basada en un protocolo distinto: el protocolo de “prueba de participación”.
En el protocolo de prueba de participación los creadores de nuevos bloques son elegidos en función de su participación en la red, no de su capacidad computacional. Y para crear nuevos bloques no se requiere potentes computadoras con altísimos costos energéticos, de ahí que los costos de transacción sean mucho más bajos.
Cardano no es la única Blockchain que ha adoptado el protocolo de prueba de participación, aunque sí fue una de las primeras…
Las ventajas del protocolo de prueba de participación frente al de prueba de trabajo son tan evidentes que Ethereum está copiando a las criptomonedas de tercera generación y está desarrollando una nueva versión llamada Ethereum 2.0 que lanzará a finales de este año o principios del próximo.
La cuarta generación: Internet Computer Protocol
En un mundo que cambia tan rápido como el de las criptomonedas es difícil pronosticar cuál será la próxima gran fuerza que defina el futuro de este mercado.
Una de las criptomonedas emergentes que mejor se posicionó para ello es el Internet Computer Protocol (ICP), desarrollado por la Fundación Dfinity.
Esta criptomoneda ha sido uno de los mayores proyectos en el mundo cripto, con inversiones totales por 195 millones de dólares que aportaron algunos de los mayores fondos de venture capital del mundo como Andreesen Horowitz y Polychain Capital.
El desarrollo comenzó en 2018 con el trabajo de 190 desarrolladores repartidos en las oficinas de Dfinity en San Francisco y Zurich. Tras más de 3 años de desarrollo, el 10 de mayo de este año se lanzó la red de ICP.
Según publicó Dfinity, el objetivo de ICP es “crear una nube descentralizada y escalable hasta el infinito que permita generar aplicaciones y sitios web hasta ahora alojados en los servidores de las grandes compañías de hosting”, como Amazon Web Services por ejemplo.
Esta nube estará compuesta por decenas de centros de datos que funcionarán de manera parecida a Bitcoin o Ethereum, y es que por mantener esta nube funcionando estos nodos recibirán como recompensa el token de ICP que además de cotizar en los exchanges de criptomonedas, otorgan derecho a votar en la gobernanza de la red ICP.
La gran diferencia respecto a Ethereum y a sus sucesores como Cardano es que los nodos que operan la ICP disponen de un hardware estándar, que según ICP permite “proveer una escalabilidad ilimitada, una mayor velocidad y una mayor eficiencia lo que se traduce en un menor costo”.
Dfinity afirma que su red es capaz de realizar transacciones en 3 segundos, frente a una hora que le toma a la red de Bitcoin y 10 minutos a la red de Ethereum en promedio.
A pesar de su corta historia en la actualidad ICP es la 16º criptomoneda más valiosa, con un valor total de 10.000 millones de dólares.
Ahora antes de terminar te hago una pregunta: ¿cuál pensás será la próxima gran criptomoneda y por qué?
Compartí tu opinión con el resto de la comunidad en la sección de comentarios.
